domingo, 26 de febrero de 2017

Volar

   Nunca he soñado con volar. ¿Significará algo?  De hecho siempre me atrajo más el Peter Pan que lidiaba con su propia sombra que el que sobrevolaba el Big Ben y las nubes; el que intentaba medir los límites de sí mismo, más que el que observaba a los demás espada en mano desde el tejado.
   Lo cierto es que no temo las alturas, pero está claro que no me tienta la vista desde el cenit, la mirada lejana de las cosas, desde fuera de mí y sin que me rocen. Prefiero el confort curioso de visitar y hacerme visitar por lo que me rodea en un tú a tú que me defina mientras define aquello a lo que pertenezco. 
   Probablemente esta rareza no lo sea tanto y no suponga más que otra manera de autoafirmarse una.


Durero

domingo, 19 de febrero de 2017

Febrero

   El árbol tiene el ramaje pardogrisáceo y sarmentoso. Es mi árbol ascético de todos los inviernos, el de la firme adustez que esconde una magnificencia de raíces.  Por las mañanas, los gorriones revolotean a su alrededor y dan la apariencia de envolverlo en un hilo invisible. A veces se posan en una ramita precaria simulando anudar delicadamente el hilo de su red misteriosa y hablan entre ellos: -¿te parece bien aquí?, ¿te hace daño?-  He llegado a pensar que ese hilo existe, que es el que preserva la corpulencia seca de los desmanes de febrero y sólo ellos, los pájaros y el árbol, están en el secreto.

María Kitano

domingo, 12 de febrero de 2017

Asentidores

   El asentidor, nueva profesión mediática. La ejerce siempre alguien situado tras el orador político. ¡Recuerda tanto a aquella señorita circense, ligera de ropa, que aparecía en el escenario sólo para señalar, hiperbólica y muda, el engaño vistoso del prestidigitador! 

Chagall